TW
0

El candidato de CiU a la Presidencia de la Generalitat, Artur Mas, compareció ante la militancia nacionalista con «orgullo» y «satisfacción» por la victoria y comprometiéndose a «administrar la victoria con humildad» y con el objetivo de «no menospreciar a nadie», porque «de todo el mundo se puede aprender». Mas proclamó que CiU ha logrado su objetivo que «Catalunya se gobierne desde Catalunya» y que la Generalitat «no caiga en manos de aquellos que tienen su centro de decisión fuera de Catalunya», en referencia al PSC.

En el hotel donde la cúpula de CiU siguió los resultados, se abrieron más de 200 botellas de cava para celebrar la victoria y la fiesta se trasladó a la calle, al Paseo de Gràcia. Mas destacó la existencia de «una mayoría sólida nacionalista» en el Parlament de Catalunya con los 46 diputados de CiU y los 23 de ERC que recordó a «todos aquellos que quieran tomar nota» y señaló que CiU está «al servicio de un objetivo: que la mayoría nacionalista lidere el proceso del nuevo Estatut».

Mas también se puso «al servicio de Catalunya y su gente» como ganador de estas elecciones, aunque aseguró que «la victoria es de toda Catalunya». «Ha ganado el 'Sí a Catalunya'», señaló entusiasmado, recordando que su proyecto se basa en la defensa del actual modelo de país y «que Catalunya se gobierne desde Catalunya» con el objetivo principal de «llevar a Catalunya más allá». El candidato de CiU, rodeado de Jordi Pujol, Josep Antoni Duran Lleida, y sus colaboradores más cercanos no pudo esconder su «satisfacción» personal por la victoria y no olvidó agradecer el trabajo del president y de su compañero de tandem, que alabó la «victoria trabajada» de CiU después de 23 años de gobierno «con renuncias en favor de los intereses de Catalunya».