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Los aeropuertos españoles restablecieron ayer la normalidad operativa tras recuperar la total actividad de control y superar durante la noche del sábado los retrasos de vuelos acumulados debido a la huelga de controladores aéreos iniciada el sábado, según informó ayer Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA).

Esta vuelta a la normalidad se debe a que la plantilla de control del centro de Torrejón de Ardoz situado en Madrid, que se incorporó voluntariamente en la tarde del sábado, estuvo trabajando al completo en la jornada de ayer, al igual que el resto de centros y torres de la red.

La normalidad operativa en los aeropuertos se recuperó de forma progresiva desde la tarde del sábado y los retrasos se prolongaron durante la noche debido a las demoras acumuladas. AENA lamentó los perjuicios causados a los pasajeros por la huelga que provocó el sábado más de una cincuentena de vuelos cancelados y que tuvo mayor repercusión en los aeropuertos de Barajas (Madrid), que acumuló retrasos medios de 71 minutos y el de El Prat (Barcelona), que registró una media de 29 minutos de demora en sus vuelos.

Por otro lado, AENA desmintió las declaraciones del portavoz de Infraestructuras del PSOE, José Segura, en las que afirmaba que este organismo impedía la formación e incorporación de nuevos controladores, ya que, según datos del holding público, el número de controladores ha crecido un 48'2 por ciento en los últimos siete años.

En concreto, la plantilla de este colectivo asciende en la actualidad a 2.009 empleados, frente a los 1.355 que registró en 1996, lo que supone 654 incorporaciones de controladores, lo que refleja el esfuerzo de AENA y SENASA por elevar el número de controladores, que entre 1982 y 1998 sólo aumentó en 450 trabajadores.