El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, compareció
finalmente junto a Josep Lluís Carod-Rovira, para explicar la
situación en la que queda su Gobierno tras esta crisis. Así,
aseguró que su ex conseller en cap tendrá siempre las puertas
abiertas para regresar «si su actitud es la que debe ser».
Maragall anunció que Carod dejaría en las próximas horas su puesto
como conseller sin cartera, para poder así encabezar la lista de
ERC por Barcelona el 14-M. ERC restó importancia a la necesidad de
una toma de posesión «formal y solemne» de Carod, a pesar de las
quejas de CiU y PP, que censuraron que haya comparecido sin
prometer fidelidad al president por este nuevo cargo.
«Tiene la puerta abierta si su actitud es la que debe ser», dijo
Maragall, que explicó que su Gobierno actuará sin conseller en cap.
El portavoz parlamentario del PSC, Miquel Iceta, confirmó las
pretensiones de Maragall al asegura que Carod, «esté donde esté,
seguirá siendo un motor de este Gobierno» que «lleva su firma». Eso
sí, dejó claro que los socialistas consideran «un error gravísimo»
su reunión con ETA. «No compartimos el planteamiento de fondo»,
dijo, ya que «ninguna iniciativa unilateral de un partido» puede
contribuir a la desaparición de la banda terrorista.
Donde sí hubo un punto de discrepancia entre Maragall y Carod
fue a cuenta de las disculpas que, según el presidente de la
Generalitat, debe presentar su conseller al Gobierno central y al
pueblo catalan «por utilizar su nombre en una iniciativa personal
que sólo le compete a él». Debe hacerlo, dijo, «tanto si nos gusta
como si no y más allá de quien gobierna, porque representan a un
pueblo que ha sufrido». Carod no se disculpó, aunque su partido
explicó que, con su comparecencia, el líder republicano ha
presentado las «excusas».
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