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Gracias a la modificación del régimen penitenciario que ha realizado la Audiencia Nacional, el ex general Enrique Rodríguez Galindo podrá pasar a tercer grado penitenciario, que supone que el preso sólo pasará en prisión las noches y tendrá los fines de semana libres, sin haber cumplido la mitad de la condena de 75 años, impuesta por el secuestro y asesinato de José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala. El portavoz de la familia de Galindo dijo que esta decisión judicial ha confirmado que el preso está sujeto al antiguo Código Penal, por lo que ha de tener derecho de acceso al tercer grado, que le reduciría la pena que se le asignó. De esta forma, la familia del ex general está «satisfecha» con lo acordado.

En el acto dictado ayer, el juez no se pronunció sobre el paso a tercer grado de Galindo, que fue solicitado por el fiscal de la Audiencia Nacional, Pedro Rubira. Aún así queda abierta la vía que le otorgaría la excarcelación, ya que se ha establecido que no debe cumplir la mitad de la condena.

El juez Central de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional, Javier Gómez Bermúdez, ha aplicado a Galindo el régimen general de cumplimiento penitenciario, que se otorga en casos especiales a condenados a penas superiores a cinco años de cárcel. De esta forma, el ex general podrá pasar a tercer grado sin haber cumplido la mitad de la condena de 75 años de cárcel que se le impuso.

El juez también ha tenido muy en cuenta el pronóstico de la reinserción social de Galindo que, según la junta de tratamiento de la cárcel de Ocaña, ha sido «mayoritariamente favorable». Ante estas decisiones judiciales, las familias de los asesinados Lasa y Zabala no han alegado nada, a pesar de que el juez de Vigilancia les dio un plazo de cinco días para hacerlo.