El Consejo de Ministros estudia hoy medidas para dar cumplimiento a
su compromiso de suspender el calendario de aplicación de los
puntos más polémicos de la Ley Orgánica de Calidad de la Educación
(LOCE), impulsada por el PP, como adelantó el presidente del
Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero en el debate de su
investidura.
Previsiblemente, la ministra de Educación, María Jesús
Sansegundo, presentará un informe sobre las acciones a realizar en
torno a la norma educativa y, a partir de ahí, comenzar a trabajar
en una reforma de la misma, como anunció la ministra de la
Presidencia, María Teresa Fernández de la Vega, el pasado
viernes.
El Consejo de Ministros aprobará cuatro cambios legislativos que
desactivarán la Ley de Calidad. El Ejecutivo derogará la entrada en
vigor a partir de septiembre de la asignatura de religión católica
y su alternativa. Esta paralización supone que ninguna de las dos
materias tendrá valor académico, es decir no computará con nota y
por tanto no será evaluable ni obligatoria.
También se paralizará la implantación de la prueba general de
bachillerato, denominada en el mundo educativo como «reválida».
Otro punto polémico que quedará derogado es el que concierne a los
denominados itinerarios, es decir, los alumnos de tercero y cuarto
de secundaria -14 años- que debían elegir una serie de materias
-letras o ciencias- que fijarían su futuro universitario.
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