Primer detenido por los atentados del 11-M en Estados Unidos. El
FBI arrestó a Brandon Mayfield, un abogado norteamericano
convertido al Islam, como sospechoso de ser «testigo material» de
los atentados de Madrid. Agentes de la Comisaría General de Policía
Científica española hallaron su huella en diverso material
relacionado con los atentados, como cartuchos de dinamita,
detonadores o una bolsa de deporte. Al no estar fichado por las
fuerzas de seguridad españolas, se recurrió a Interpol.
Mayfield estaría relacionado con una red islamista que fue
desarticulada el año pasado en Portland, en el estado de Oregón. Al
ser considerado «testigo material» del 11-M, se le puede arrestar
pero no acusar de estos atentados. La Policía ha registrado tanto
el estudio de abogado que posee en Portland como su domicilio en
Beaverton.
Sus huellas estaban en diverso material del 11-M. La Comisaría
General de Policía Científica española las halló y, al no
encontrarlas entre los delincuentes que forman parte de las bases
de datos en España, la distribuyó a través de Interpol mediante una
difusión internacional con distintivo azul, que se usan para
obtener más información sobre la identidad de una persona o de sus
actividades delictivas.
Esta orden está dirigida a localizar a presuntos delincuentes,
aunque no se haya decidido solicitar su extradición y para posibles
testigos de un delito. Así, todos los países miembros pudieron
comprobar si la huella pertenecía a alguna persona con antecedentes
que figurase en sus ficheros. Mayfield, cuyo nombre árabe por su
conversión al Islam no ha trascendido todavía, apareció por su
relación con una red islámica.
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