El Gobierno vasco acusó ayer a la organización terrorista ETA, tras
conocer los atentados cometidos ayer en Galicia, de «romper», con
sus acciones violentas, «las esperanzas de paz y diálogo de los
ciudadanos».
En un comunicado de condena hecho público por Lehendakaritza, el
Ejecutivo repudió las actuaciones de la banda terrorista en
Sanxenxo y Baiona, a la vez que advirtió a los activistas que «no
podrán decir que actúan en nombre del pueblo vasco, no podrán decir
que lo hacen por la patria».
En la nota, el Gobierno autónomo aseguró que los ciudadanos «han
vuelto a tener noticia de las intenciones de paz y concordia que
ofrecen quienes pretenden justificar lo injustificable: que la
violencia es una vía útil y necesaria para defender sus ideas
políticas».
«Dos bombas en las localidades gallegas de Baiona y Sanxenxo han
roto de nuevo la convivencia pacífica que reclama la inmensa
mayoría de los ciudadanos y gallegos», aseguró el comunicado del
Ejecutivo vasco.
Tras aludir al balance de esta acción, tres heridos leves, se
preguntó «quién sabe o quién puede garantizar que no podría haber
resultado peor o, incluso, fatal».
Tras manifestar que los indicios apuntan a que los autores de
los atentados cometidos ayer en Galicia son «nuevamente» miembros
de ETA, censuró a la banda terrorista que se empeñe «en romper en
mil pedazos las esperanzas de paz y diálogo que albergan los
ciudadanos».
El Ejecutivo Ibarretxe manifestó su «condena radical ante este
tipo de acciones violentas y sectarias» a la vez que mostró su
«solidaridad y cercanía» con los heridos, «con sus familiares y
amigos, y con toda la sociedad gallega». «Todos los vascos nos
sentimos afectados por el dolor y sufrimiento que injustamente se
ha causado a una persona inocente», aseguró.
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