El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sigue
manteniendo la tranquilidad y llamando a la calma para responder al
Plan Ibarretxe. Afronta sin nerviosismo sus reuniones con el
lehendakari y con Rajoy, y lo hace garantizando que no se
suspenderá la autonomía vasca y mostrándose convencido de que
coincidirá con el PP en el rechazo al proyecto en el Congreso. Pero
a los populares les lanzó un severo reproche para apelar a esa
calma. Dijo que tiene una comunicación «infinitamente mejor» con
Rajoy que la que mantuvo Aznar con él cuando era el líder de la
oposición.
Zapatero no va a atender a quienes hablan de suspender
competencias o incluso la autonomía vasca, en alusión a los
presidentes Ibarra y Fraga. «El recordatorio que ha hecho el señor
Fragaquiza es una luz de por donde no creo que deban ir las cosas.
No me parece brillante el ejemplo de invocar 1934», explicó el jefe
del Ejecutivo.
La tranquilidad que mantiene Zapatero se refleja en sus
explicaciones sobre el orden en que se reunirá con Ibarretxe, el
día 13, y con Rajoy, 24 horas después. El líder de la oposición,
dijo, «va a conocer todas las opciones que se contemplan una vez
que yo haya escuchado al lehendakari».
Al presidente del Gobierno no le ha gustado la reacción del PP a
esta cuestión, ya que será la cuarta vez que se reúna con Rajoy en
los apenas nueve meses que lleva como presidente del Gobierno, más
ocasiones que en las que él visitó La Moncloa con Aznar como
presidente. «El nivel de diálogo, de apertura, de interlocución, ha
sido desde el primer día fluido y abierto, desde luego
infinitamente mejor que el que hubo en la etapa anterior»,
aseveró.
En este sentido, Zapatero aseguró que responde inmediatamente
cada vez que Rajoy se pone en contacto con él, «no como pasaba
antes». Así, recordó que iniciativas como la Ley de Partidos
llegaron al PSOE por los medios de comunicación o «no por Aznar
sino por Rajoy», y que el entonces presidente del Gobierno rechazó
muchas peticiones de Zapatero para reunirse, como tras la
catástrofe del 'Prestige'. Por eso, pidió a los populares que
pongan «un poco de juicio y recordar antes de hablar».
Zapatero tendió la mano a Rajoy al asegurar que la reunión será
«para compartir, escuchar e informar» de todo lo que acontezca en
el encuentro con Ibarretxe. «También le informaré de la posición
que el Gobierno mantendrá en el ámbito parlamentario y que
seguramente será coincidente con la que ya ha expresado el PP y que
se visualizará en el debate», añadió. El jefe del Ejecutivo
transmitirá a Rajoy las iniciativas que puede plantear el Gobierno
para hacer frente al Plan, pero que no pasan por recurrir al
Constitucional, como quieren los populares.
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