Zapatero es aplaudido durante su visita a Albacete para participar en un mitin en favor del 'sí' a la Constitución.

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EFE-ALBACETE
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, explicó a quienes defienden el «no» o el «sí con la boca pequeña», la «inmensa fortuna» que supone para los españoles poder votar una Constitución que «une a la inmensa mayoría de los españoles, sean conservadores o progresistas, nacionalistas o no nacionalistas, jóvenes o mayores, tengan más o menos recursos».

Escuchar, dialogar y debatir, dijo Zapatero, son las claves para resolver los problemas de la democracia -en alusión al plan Ibarretxe-, y por eso «la mejor estrategia ha sido, es y será siempre aplicar los principios y los valores que uno tiene, porque cuando no se aplican los ideales, cuando se antepone la estrategia o la táctica en el corto plazo, la ciudadanía se da cuenta».

Aseguró que ante la Constitución Europea no caben «estrategias ni tácticas» políticas, sino que debe decidirse desde «principios y valores democráticos» y a través del «debate y el diálogo», igual que se hizo, dijo, con el plan Ibarretxe.

Además, reiteró que el referéndum no pretende decidir «sobre un artículo, una coma o una frase» del texto, «se convoca para ver si se comparte un gran proyecto de convivencia», y por tanto su ratificación no debe abordarse como «una estrategia ni una táctica».

El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, apeló por su parte a votar 'sí' al Tratado para «luchar con más eficacia» contra el terrorismo, al que se refirió como el «único cáncer del franquismo que queda por superar».