Imagen del material encontrado ayer por la policía en el garaje de un edificio de Hernani.

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La policía ha encontrado casi 50 kilos de explosivo Titadyne y dos subfusiles con sus respectivos cargadores en el registro practicado ayer en el trastero de un edificio de la calle Txirrita de Hernani (Guipúzcoa), donde tenía su domicilio Marta Igarriz, detenida el pasado jueves en relación con el «complejo Donosti» de ETA. Según informó el Ministerio del Interior, en el registro, que comenzó a las 23.00 horas del sábado, también han sido hallados doce kilos de una sustancia que podría ser algún tipo de clorato, empleado por ETA para fabricar explosivo, 1,5 kilogramos de azufre, 42 metros de cordón detonante, catorce detonadores eléctricos y tres temporizadores.

El registro, que ha sido llevado a cabo por miembros del Grupo de Desactivación de Explosivos (TEDAX) y NRBQ con sede en Bilbao y de las Unidades de Información de la Policía, se enmarca en la operación iniciada el pasado día 25 de marzo, que permitió la desarticulación del «comando Donosti» de ETA y que continuó el pasado jueves con el arresto de Igarriz y otras dos personas.

La policía también se ha incautado de dos sistemas antimovimiento para bombas-lapa, un sistema emisor y receptor, una termoselladora, un artefacto utilizado para la apertura de vehículos y elementos para la confección de otro, un escáner y un medidor de circuitos. Por último, fueron encontradas varias placas de matrícula vírgenes, así como cinta de color negro para la confección de números y letras de las mismas y una remachadora para fijarlas a los vehículos.

El 25 de marzo fueron detenidos en un piso del barrio donostiarra de El Antiguo tres supuestos terroristas «liberados» (a sueldo) de ETA identificados como Iker Olabarrieta Colorado, de 27 años; Igor González Sola, «El Enfermo», de 32, y Carmelo Laucirica Orive, de 27. Los tres ingresaron el día 30 en prisión incondicional por orden del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska acusados de los delitos de pertenencia a organización terrorista, tenencia ilícita de armas, depósito de explosivos y falsificación de documentos y de tarjetas de crédito.

En la vivienda en la que fueron detenidos la policía encontró tres pistolas, un subfusil, munición, así como DNI, permisos de conducir, placas y carnés de miembros de las Fuerzas de Seguridad, de estudiantes y de ONG y otro tipo de organizaciones falsificados. El magistrado consideró que los detenidos formaban el «comando Amaiur», nuevo nombre del «complejo Donosti».