«Basta ya», añadió, porque el PCTV es un partido legal que está
soportando «presiones fascistas intolerables» y se mostró
convencida de que «las 150.000 personas que eligieron la papeleta
del Partido Comunistas de las Tierras Vascas el pasado 17 de abril
exigieron un nuevo escenario de paz y democracia».
Aranburu explicó que los interventores eran «del PCTV, ni de
Batasuna, ni de EH», aunque ya se sabe que muchos de ellos eran
concejales y cargos públicos de la formación ilegalizada. Según
explicó, fue posible nombrar interventores en la mayoría de las
mesas, algo de lo que se jactó Batasuna en su informe sobre estas
elecciones autonómicas, «gracias a la marea de solidaridad» que se
desató a su favor, según dijo, en el País Vasco. La representante
de EHAK recordó que éste es «un partido pequeño», por lo que
durante la campaña solicitó ayuda económica y «recursos humanos»
para hacer frente «a todo lo que suponen unas elecciones
autonómicas».
La dirigente comunista abertzale respondió así a la
investigación sobre los interventores del Fiscal General, exigiendo
además al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero,
que «acabe con estos comportamientos fascistas». «Ya es hora de
envainar esa espada de Damocles que ha colocado sobre nuestras
cabezas», le pidió.
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