EfeMadrid13/05/05 0:00
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En la intervención posterior a la del portavoz del grupo socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, Zapatero hizo un elogio del diálogo en política y aseguró haber aprendido de todos los representantes de los partidos que tomaron la palabra en el debate. «Está de más decir que su punto de vista con frecuencia no era el mío, pero precisamente por eso he aprendido de todos y cada uno de ellos, también del señor Rajoy, e incluso me he esmerado por separar sus razones de algunas de las palabras con las que se expresó», añadió en alusión a las relativas a la supuesta traición a las víctimas del terrorismo.

«Es mi compromiso y aquí está mi mano tendida a todos», sentenció Zapatero, quien agradeció las intervenciones de todos los grupos parlamentarios y reiteró su defensa del diálogo como valor esencial en democracia. Aunque reconoció que tienen razón los portavoces que han advertido durante los dos días de debate de que el diálogo no basta porque si no desemboca en una acción política se hace inútil, señaló que cuando esta acción no viene precedida del diálogo se transforma en imposición.

Por ello, dijo que se queda con esas razones y da por olvidadas esas palabras aunque recordó que el miércoles pidió a Rajoy que las retirara pero su intento fue en vano. «Para mí ya están retiradas, nunca se han dicho, nunca han sonado en esta Cámara», aseveró Zapatero, quien se refirió a una de sus intervenciones de ayer por la mañana en las que dijo que al PSOE y al PP sólo les une el dolor ante las víctimas del terrorismo.

Pero consideró que es suficiente porque ese es el sentimiento que le llevó a proponer el Pacto Antiterrorista, al tiempo que recordó una cita de Jorge Luis Borges («no nos une el amor, nos une el espanto») para señalar que fue el espanto ante el terror lo que le llevó a proponer ese Pacto. Zapatero dijo que quería cerrar el debate con una apelación a la unidad democrática porque se lo merecen los españoles.

Zapatero afirmó por la mañana que actuará «contra viento y marea» en el final de ETA y en la pacificación del País Vasco y consideró que ayer quedó demostrado que el PSOE y el PP ya no comparten nada salvo el dolor por las víctimas. En su respuesta al portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, Zapatero hizo hincapié en el nuevo escenario que han abierto en Euskadi las elecciones del 17 de abril.

En ese nuevo tiempo aseguró que se va emplear «a fondo» para que «la oportunidad cuaje» y lo hará «contra viento y marea, contra el viento de la deslealtad y la marea de la intolerancia». Un objetivo ante el que se mostró convencido de que el PNV actuará con responsabilidad.

Zapatero rechazó las críticas de Erkoreka ante las similitudes del PSOE y PP en su actuación en el País Vasco y dijo que «por desgracia» para ambas formaciones y tras la sesión de ayer en el debate sobre el estado de la nación, ya sólo comparten en este momento el mucho dolor sufrido a consecuencia del terrorismo.