Momento de la detención de uno de los integristas radicales en Málaga.

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La policía detuvo ayer a 16 miembros de una red islamista que se dedicaba al reclutamiento y adoctrinamiento de «muyahidines» para enviarlos a Irak con la intención de que llevaran a cabo acciones terroristas, bien tipo suicida, bien mediante su integración en grupos terroristas en ese país.

Estos componentes han llamado la atención de la policía ya que pueden ser utilizados para la elaboración de explosivos, pero también es cierto que, según señaló el ministro del Interior, José Antonio Alonso, no se han hallado otros «indispensables» para ello. Además, se ha intervenido diversa documentación, más de 10.000 euros en efectivo y documentos falsos.

Así lo avalan los datos recogidos durante la operación «La Unión» desarrollada contra una red presuntamente dirigida por Hiyag M., alias «Abu Sufian», un iraquí de 25 años detenido en Nerja (Málaga) que mantenía contactos en Irak, donde disponía de acceso «muy cercano» al miembro de Al Qaeda Al Zarqawi.

Los agentes no han constatado que la célula tuviera entre sus objetivos cometer atentados en territorio español, pero están investigando si los detenidos en la operación desarrollada en Sevilla, Lleida, Málaga y Palma, pretendían preparar algún tipo de explosivo con los elementos incautados en dos registros.

Entre esos elementos se encuentran dos botellas de plástico de un litro cada una de acetona y otras tantas de aguarrás puro, disolvente, agua oxigenada, pastillas efervercentes y bicarbonato.

Los arrestados tenían entre sus actividades la distribución de sermones religiosos de contenido radical, la captación de «muyahidines» dispuestos a combatir a favor de la «yihad», y la obtención de documentación falsa para su envío a lugares en conflicto, como es el caso de Irak.

La red estaba perfectamente estructurada y organizada y dentro de ella existía un «núcleo duro», que tomaba las decisiones; un subgrupo dedicado al reclutamiento de «nuevos adeptos» -se producía en «espacios y ambientes plurales», según Alonso- y a la financiación de la célula; otro a la falsificación de documentos y el último, que podría formar el «aparato ideológico».

Los detenidos se relacionaban entre sí por internet y mantenían reuniones personales en mezquitas y casas particulares, pero además tenían contactos en otros países.

Los investigadores han detectado diversos contactos llevados a cabo por el principal investigado, «Abu Sufian», con personas que se encuentran relacionadas con los grupos terroristas que operan en la actualidad en Irak contra los efectivos militares allí destacados.

«Abu Sufian» controlaba a un grupo de individuos dispuestos a viajar a Irak como muyahidines, probablemente en acciones de carácter suicida, y de hecho la policía cree que dos de ellos iban a partir en breve hacia ese país.

El líder de la célula desarticulada se beneficiaba además de la buena situación económica de otro de los detenidos en Nerja, José Antonio D. M., de 47 años, un español converso al islám.

El tercer arrestado en Nerja, Bahbah El H., nacido en Marruecos, fue imán en la mezquita de Ceuta y otro de los detenidos en Málaga, Mohammed G., nacido en Accra (Ghana), es el actual imán de la mezquita de La Unión, también en Málaga, tras haber provocado la salida de Oussama A., nacido en Oujda (Marruecos). Este último estaría dispuesto a viajar a hacer la «yihad» a Irak.