Pasqual Maragall ensalzó ayer el nuevo Estatut como el «pacto entre las soberanías catalana y española» e invitó a los catalanes a que hagan el «ejercicio» de constatar el «paso de gigante» que es respecto al actual.
Maragall destacó que, después de muchos meses de trabajo y negociación, ahora «podemos tocar con los dedos» la aprobación del Estatut. También subrayó que los representantes del Parlament y de las Cortes «hemos sido capaces de dialogar y entendernos, a pesar de la desmesurada y agresiva campaña de quienes se oponen a la mejora del autogobierno de Catalunya, casi diría que por principio».
El presidente catalán abrió el turno de las valoraciones políticas con la lectura de una declaración institucional con motivo de la Diada de Sant Jordi, en un acto celebrado en el Palau de Pedralbes de Barcelona que contó con la asistencia de unas 4.000 personas.
A 24 horas de que se inicie el trámite en el Senado, el Estatut fue el eje de la jornada política de Sant Jordi, a la espera de que el 10 de mayo el nuevo texto sea votado en la Cámara Alta y se celebre el referéndum el próximo 18 de junio en Catalunya.
Para Maragall, quienes se oponen al Estatut también se oponen «a la eclosión de la España plural, sin aquello que da a este país precisamente su gracia y su interés».
«Después de todo debe quedar aquello que es esencial, que es que el nuevo Estatut es el fruto del pacto entre la representación de la soberanía popular catalana, que es el Parlament, y la representación de la soberanía popular española. Es el acuerdo entre dos soberanías, entre dos Parlamentos», aseguró Maragall.
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