El dispositivo acompañó a la embarcación hasta el puerto de Cádiz, donde se había dispuesto un importante despliegue de medios para evaluar el estado de los inmigrantes y atenderlos en caso de necesitarlo. El servicio de emergencias 061 dispuso su unidad de apoyo logístico u hospital de campaña y el Servicio Andaluz de Salud alertó a los hospitales Puerta del Mar y San Rafael, en Cádiz, así como al Clínico de Puerta Real.
El barco, bautizado como Anat Tg-99, fue avistado por el pesquero María Luz Cárdenas sobre las 13.30 horas a unas nueve millas de las costas de Chipiona. Hasta el lugar se desplazaron la embarcación de intervención rápida de Salvamento Marítimo Salvamar Gadir, el remolcador Sertosa XVIII, dos embarcaciones de la Guardia Civil y el helicóptero Helimer Andalucía.
Además en el muelle se encontraban más de cien personas, entre agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, técnicos de Sanidad Exterior y personal sanitario. Según las primeras estimaciones, el pasaje estaba integrado por unos 200 inmigrantes cuya nacionalidad está por determinar. Algunos llegaron con síntomas de deshidratación y tuvieron que ser atendidos por la Cruz Roja.
Esta fue la noticia más reseñable del día en cuanto a llegada de inmigrantes, que por otro lado se desarrolló tranquilo. En Canarias tan sólo fue avistada una embarcación, a bordo de la cual viajaban 30 inmigrantes y que fue detectada mientras se encontraba a la deriva en alta mar sin combustible. La barca fue rescatada por un mercante a 105 millas de la costa de Gran Canaria, que le tendió un cabo a la espera de que llegara Salvamento Marítimo.
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