La directora de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, ha trasladado al presidente del Gobierno que los presos de ETA apoyan sin discrepancias el alto el fuego declarado por la banda.
La directora de Instituciones Penitenciarias, aunque no quiso pronunciarse sobre un posible acercamiento de presos a las cárceles situadas en el País Vasco, se mostró convencida de que «el sistema penitenciario se adaptará sin ninguna dificultad a la decisión que se marque».
Una parte de la verificación de la autenticidad del alto el fuego ha sido el 'frente de los presos'. Gallizo explicó que Instituciones Penitenciarias ha realizado una comprobación «por medios propios» de cómo se ha recibido la noticia entre los etarras que cumplen condena. Hay, explicó, una «expectativa positiva» sobre el desarrollo del proceso de paz y los condenados apoyan la tregua sin «discrepancias».
Gallizo, eso sí, explicó que los cabecillas de ETA no han cambiado sus hábitos. Dentro de este grupo se encuentran las actitudes desafiantes de etarras como Francisco Javier García Gaztelu, 'Txapote', durante su juicio de esta semana, que evidencian que no tienen «ningun atisbo de reinserción».
Uno de los puntos más destacados de la verificación que hace el Gobierno de la autenticidad de la tregua de ETA es la extorsión a los empresarios. Y cada vez parece más claro que este chantaje ha cesado. Confebask aseguró ayer que no consta la existencia de nuevas cartas y que comparte los criterios del Ejecutivo. Las patronales vizcaína y guipuzcoana -esta última recibió ayer como presidente electo a Eduardo Zubiaurre- afirman que «ha desaparecido» este fenómeno y sólo los alaveses dicen que no tienen datos que les permitan afirmar una cosa o la contraria.
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