El dirigente de Batasuna Joseba Permach dijo ayer que para el «tránsito» de su formación hacia una situación «democrática» se deben «dejar sin efecto los mecanismos» creados «para acabar con la izquierda abertzale», incluida la Ley de Partidos.
Así respondía Batasuna al PSE-EE, que exigió a esta formación que se legalice para poder mantener nuevos encuentros.
A esta exigencia, el portavoz del PSE-EE, Rodolfo Ares respondió que «no traslade falsas esperanzas a su gente», porque «él sabe que el Gobierno no va a derogar» la Ley de Partidos, en virtud de la cual fue ilegalizada en su momento Batasuna.
El portavoz de Batasuna, en rueda de prensa en San Sebastián junto a Juan José Petrikorena, insistió en que la izquierda abertzale no modificará su actual situación ilegal para volver a un marco jurídico «antidemocrático» que supuestamente no respeta ni la «voluntad» ni los «derechos civiles y políticos» de muchos vascos.
Permach consideró que «tras meses o años» de reuniones informales entre Batasuna y el PSE-EE, «no se cree nadie» que a partir de ahora no se vayan a producir nuevos encuentros si no legaliza su situación.
Avanzó que la «prioridad» de Batasuna no será trabajar en su legalización, sino seguir manteniendo reuniones con los partidos que quieran hacerlo.
El socialista Rodolfo Ares, en declaraciones a Efe, trasladó a los dirigentes de la ilegalizada Batasuna que «si realmente quieren hacer política en democracia, lo que deben hacer es cumplir las leyes y respetar las reglas del juego» del Estado de Derecho.
«La democracia no va a rebajar sus exigencias para que ellos puedan participar en política, desde la legalidad», puntualizó Ares, quien concluyó que «mientras sigan con un discurso como el que ha hecho hoy Joseba Permach, simplemente estarán engañándose y trasladando falsas esperanzas a su gente».
El secretario de Política Municipal y Libertades Públicas del PSOE, Alvaro Cuesta, instó a Batasuna a incorporarse «a la legalidad y a la Constitución» si quiere ser «interlocutor político» en el País Vasco, y aseguró que la voluntad de los socialistas es «no modificar» la Ley de Partidos.
Subrayó que si Batasuna quiere volver a participar en política, «tiene que incorporarse a la legalidad y a la Constitución», y precisó que «la palabra firme y la voluntad de todos los socialistas es que no se modifique la Ley de Partidos».
Por su parte, el secretario ejecutivo de Comunicación del PP, Gabriel Elorriaga, afirmó que las declaraciones del portavoz de Batasuna ponen de manifiesto la «debilidad» que muestra el Gobierno ante ETA al «ceder a todos sus emplazamientos y dando alas a los representantes de los terroristas».
Para el dirigente del PP, es «evidente» que Batasuna «le ha tomado la medida al PSOE y a José Luis Rodríguez Zapatero» y que esta organización ilegalizada «va aumentando sus exigencias día a día e incrementando el chantaje al Estado de Derecho».
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