Iker Beristain y Liher Rodríguez, presuntos miembros de ETA detenidos el lunes cerca de París, estaban trasladando en el momento de su arresto el aparato de falsificación de la banda. Pretendían moverlo a un nuevo piso, pero la interceptación da supuestamente al traste para las Fuerzas de Seguridad española y francesa con la estructura, según fuentes de la lucha antiterrorista.
Los dos etarras fueron detenidos cuando estaban aparcando su vehículo en las proximidades de un hotel. Las pesquisas desvelan que habían partido de un piso alquilado en la localidad francesa de Charles-Sur-Marne. El destino exacto no está claro, pero se trabaja con la hipótesis de que viajasen a un nuevo inmueble con todos los elementos incautados en el interior de la furgoneta: cuantioso material informático y otros documentos destinados a la falsificación de documentos legales, tales como impresoras, material de imprenta o tintes especiales.
También se hallaron en el interior del vehículo 16 documentos falsos de los dos arrestados, y otros de varios países europeos. La lista se completa con tarjetas de crédito, carnés identificativos de guardias civiles, dos teléfonos móviles y una pistola.
Fuentes de la lucha antiterrorista creen que ETA cuenta, de un tiempo a esta parte, con «auténticos expertos» falsificadores de documentos. La banda terrorista pretendía dejarlo claro en un vídeo distribuido en ambientes radicales vascos el pasado mayo. En la propaganda, se pretendía demostrar la precisión y habilidad de la banda, entre ellas las artes de la falsificación. La banda mostraba mediante imágenes incluso un documento francés falso y un DNI español en el que colocaban la foto de un encapuchado.
Los objetos incautados en las últimas incursiones policiales también dan una idea de la precisión de ETA como falsificadora. En el último año, se encontró documentación británica, italiana y portuguesa, posibles nuevos refugios de los terroristas a tenor de la necesidad de esos carnés.
Las sospechas de nuevos países 'guarida' de etarras partieron también de las investigaciones policiales iniciadas con la desarticulación del 'comando Donosti'.
Gran Bretaña y Portugal aparecen como posibles refugios de los terroristas. Unas sospechas acrecentadas por las incautaciones de la policía francesa en los últimos seis meses y el abandono de un coche con explosivos por parte de ETA en una carretera de la localidad onubense de Ayamonte.
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