Un etarra con explosivos huye de un taxi al ver un control de tráfico en Castellón

El presunto miembro de ETA es un varón de unos 30 años, 1'80 metros de altura, que no lleva barba y en el momento en que abandonó el taxi vestía unas gafas de sol de gran tamaño, informaron las mismas fuentes. El presunto etarra es Ander Múgica Andonegi, según fuentes de la investigación, que precisaron que las fuerzas de seguridad buscan a un segundo etarra en la zona.

Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 12:30 horas de ayer cuando un taxi circulaba por el kilómetro 10'10 de la carretera 430, dirección Barcelona, a la altura de Torreblanca (Castellón). Su ocupante se percató de la proximidad de un control de la Guardia Civil de Tráfico y pidió al conductor que se desviara por la vía de servicio alegando que se encontraba mal.

Una vez en las puertas del hotel restaurante Miramar de Torreblanca (Castellón), el etarra salió a la carrera y el taxista le perdió de vista, aunque pudo ver que huyó en dirección a la citada localidad castellonense. El taxista se dirigió inmediatamente a los guardias para contarles lo que había sucedido. En el registro del vehículo se encontró una fiambrera de color blanco con seis detonadores y dos temporizadores del tipo lapa preparados con ampolla de mercurio, según informó el Ministerio de Interior.

Además, se localizó una bolsa con cordón detonante y otra bolsa de plástico con un polvo blanco que podría ser pentrita, un explosivo que necesita de poca cantidad para un provocar un efecto devastador. Ante este hallazgo, los agentes procedieron a requerir la presencia de los TEDAX.