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OTR PRESS/EFE-MADRID Los violentos convirtieron el sábado el centro de Hernani (Guipuzcoa) en un auténtico caos al protagonizar importantes altercados a última hora de la noche. Un grupo de encapuchados incendiaron en la noche del sábado un autobús y varios contenedores, y después lanzaron artefactos incendiarios contra sucursales bancarias.

Los incidentes comenzaron sobre las nueve y media de la noche en la calle Elcano, donde un grupo de entre 20 y 30 encapuchados detuvo un autobús de la línea Garayar-Hernani, ordenó a los pasajeros que lo desalojaran, rompieron las lunas e inmediatamente le prendieron fuego con cócteles.

Después los encapuchados se enfrentaron a una patrulla de la Ertzaintza que acudió al lugar y contra la que lanzaron cocteles molotov, sin que se produjeran daños personales. Los alborotadores huyeron posteriormente por las calles cercanas mientras cruzaban en la calzada contenedores de basura, a alguno de los cuales prendieron fuego, y coches. Además, lanzaron también artefactos incendiarios contra las fachadas de dos sucursales bancarias, una de Banco Guipuzcoano y otra de la Kutxa, así como contra la Casa del Pueblo de la localidad.

Por otra parte, los históricos presos de ETA José Luis Alvarez Santacristina -expulsado ya en su día de la organización terrorista- y Kepa Pikabea, que cumplen condena en Logroño, han sido expulsados del Colectivo de Presos vascos (EPPK) por no someterse a las directrices de esta asociación y adoptar iniciativas de origen particular.

Así lo recogía ayer la edición digital del diario 'Gara', en la que el Colectivo detalla que la expulsión se produjo el pasado diciembre porque ambos decidieron «emprender su propio camino» por lo que «todas las iniciativas que puedan llevar a cabo a partir de ahora serán en su propio nombre». Denuncia esta asociación que ambos «se han sumado a la estrategia emprendida por el Gobierno de España para dividir al Colectivo».