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AGENCIAS/RL-MADRID El líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha empezado a meditar un cambio de estilo y un nuevo posicionamiento del partido de la derecha española. Según fuentes cercana a la dirección del partido, Rajoy apuesta por encarar el nuevo curso político desde posiciones menos radicales que conllevan poner fin a la crispación que ha mantenido el PP durante los últimos cuatro años.

Pese a que el líder 'popular' no ha confiado a nadie su nuevo organigrama, desde Génova pocos dudan en que se apostará por buscar consenso con el Gobierno, tal y como el propio presidente José Luis Rodríguez Zapatero le ha pedido insistentemente, la última vez el sábado en el Comité Federal del PSOE. La línea ideológica pasará esta legislatura por no hacer oposición en temas terroristas, aunque no se apoye las iniciativas gubernamentales. El talente conciliador también se notará en aceptar un pacto para la renovación del Tribunal Constitucional y la reforma de la Constitución.

Cargos
En cuanto a la renovación de altos cargos, todo se mantiene como ya ha publicado este periódico. Los dirigentes con más peso político en el PP, los llamados barones, con Francisco Camps a la cabeza, han trabajado a marchas forzadas para que Mariano Rajoy no tirase la toalla y para que siguiese al frente del PP y frenar de esta forma la ofensiva abierta por Esperanza Aguirre en la misma noche del pasado domingo.

Los movimientos que encabeza Camps, el presidente de la Comunidad Valenciana, permitieron convencer a Rajoy para que siguiera al frente del PP e iniciara la renovación de los rostros más visibles en la dirección del partido. La estrategia que comparten Valencia, Galicia, Castilla León y Andalucía es la de que Rajoy siga al frente del partido, que se presente a la reelección en el Congreso de los Populares del próximo verano y que la precipitación se aleje del proceso de renovación.

Se pretende frenar de raíz la ofensiva emprendida por Esperanza Aguirre para que Rajoy abandone y le allane el camino en su pretensión de optar a la Moncloa. Los barones del PP apuestan por una dirección de transición con caras nuevas. Serían Pío García Escudero, como secretario general, Esteban González Pons como portavoz en el Congreso. Para este último puesto también han sonado otras voces como Soraya Sáenz de Santamaría, e incluso el de Manuel Pizarro.