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El jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), general de Ejército Fulgencio Coll, tomó posesión ayer de su mando con un discurso marcado por el objetivo de continuar con «el esfuerzo, la ilusión y la dedicación» de su predecesor, el general de Ejército Carlos Villar Turrau, y en el que invocó «el orgullo y la vocación de servir a España» de todos los militares.

Tras pasar revista a la fuerza de honores en el Patio de Armas del Palacio de Buenavista acompañado por la ministra de Defensa, Carme Chacón, el general Coll manifestó su «profundo agradecimiento» por el nombramiento y expresó su «lealtad y compromiso» con un ejército caracterizado por la «calidad humana y profesional» de sus integrantes.

El nuevo JEME resaltó «el trabajo impecable» de sus predecesores en el cargo, aseguró que todos ellos cumplieron de forma «ejemplar» con el planeamiento y la dirección del Ejército de Tierra y se comprometió a mantener «el esfuerzo, ilusión y la dedicación» que pusieron el ejercicio de su mando. El general Coll concluyó su primer discurso como jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra evocando «el orgullo de ser militar» y «el orgullo y la vocación» de servir a España.

Por su parte, el JEME saliente, el general de Ejército Carlos Villar Turrau afirmó que sus dos años al frente del Ejército han sido de «intensa activididad», resaltó la «profunda reorganización» en que está inmerso y los «numerosos retos» que afronta.

La ministra de Defensa, Carme Chacón, reconoció la trayectoria académica, profesional y humana del general Villar Turrau, destacó el «magnífico trabajo» realizado con «dedicación y entrega» al Ejército y reivindicó su figura como «excelente economista».

Chacón aseguró que el relevo de la cúpula del Ejército representa «unidad y permanencia» y recordó que este ejército es «la base» de las Fuerzas Armadas en las misiones de mantenimiento de la paz en el exterior, en las que cumple una labor «esencial». Por último, subrayó que el general Villar Turrau supone «un ejemplo» y que deja la jefatura con «el deber cumplido» con «lealtad y valor».