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El gobernador del Banco de España, Miguel Àngel Fernández Ordóñez, considera que dada la «enorme incertidumbre» económica y financiera que sigue existiendo «no parecería una actitud prudente cerrar la puerta a operaciones de recapitalización», es decir, a que el Estado pueda entrar en el capital de las entidades financieras. Fernández Ordóñez, que reconoce que España «tendrá más complicado eludir la segunda ronda de efectos de la crisis», asegura que ésta puede llevar a «un proceso de reestructuración» en el sistema bancario español. Sobre el crédito, el gobernador admite que está habiendo una «contracción» en los últimos meses, por ello advierte de que tendremos que afrontar una recesión «de cierta magnitud» y un crecimiento débil o negativo del crédito.

Asimismo, alertó de que el sistema financiero español «no es inmune» a los procesos desatados por la crisis internacional, aunque no obstante recalcó que los bancos y cajas de ahorros españoles no tienen activos tóxicos en sus balances. A su parecer, la «buena salud global» del sistema financiero español es un activo de primer orden.