El tesorero del PP, Luis Bárcenas, y el eurodiputado Gerardo Galeote se han reunido con Mariano Rajoy después de que se conocieran las acusaciones de Garzón contra ellos en el 'caso Gürtel'. Bárcenas lo hizo el lunes; Galeote, ayer por la tarde. Tras estas reuniones, Rajoy no quiso hacer ningún comentario y su partido ha decidido no adoptar de momento ninguna decisión sobre estos dos políticos, ya que en el auto de Garzón no hay «nada nuevo» que añadir a la supuesta implicación de Bárcenas y Galeote en el 'caso Gürtel' ni testimonios que incriminen a estos dos políticos, según las mismas fuentes.
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, dijo que su partido pensará «con mucha tranquilidad» qué es «lo más adecuado» respecto al tesorero, Luis Bárcenas, aunque recalcó que «debe prevalecer el principio de presunción de inocencia». El juez Baltasar Garzón envió ayer al Tribunal Superior de Justicia de Madrid los 19.000 folios del 'caso Gürtel' después de que este tribunal reclamara asumir la investigación por ver indicios contra tres aforados del PP en la Asamblea de Madrid.
El magistrado acusa al tesorero del PP Luis Bárcenas y al eurodiputado Gerardo Galeote de cobrar sobornos por un valor de 1.353.000 y 652.310 euros, respectivamente, de la supuesta trama de corrupción a cambio de conceder contratos a las empresas de Correa. «Lo que hay en este auto es una relación de hechos, según Garzón, que no tenía competencia ni jurisdicción para hacerlos, para que esos hechos, en su interés, puedan ser conocidos», dijo De Cospedal.
Bárcenas entregó a la dirección del PP sus declaraciones de renta y patrimonio y pidió ser investigado por la Agencia Tributaria. Por su parte, Galeote hizo público ayer un comunicado en el que explica que su «única relación» económica con la supuesta red de corrupción liderada por Francisco Correa fue la gestión de billetes de avión para el Parlamento Europeo y la compra de un coche. Además, asegura que ha entregado al PP todos los recibos» y una relación de sus bienes inmuebles.
Algunos miembros de la dirección nacional del PP han cambiado de postura tras conocer las acusaciones de Garzón y empiezan a pensar que Bárcenas debería abandonar cuanto antes su cargo de tesorero para salvaguardar la imagen del partido y no perjudicar los intereses políticos de Mariano Rajoy. Cargos del PP han asegurado ser partidarios de que Bárcenas se aparte, al menos temporalmente, de sus actuales responsabilidades mientras se aclara su posible implicación.
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