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El presidente del PP, Mariano Rajoy, instó ayer a los senadores y diputados del PP a buscar el apoyo del resto de partidos para sacar adelante las iniciativas que España necesita ante la crisis y que el Gobierno no toma ni tiene posibilidades de sacar adelante en las Cortes porque está «en total y absoluta soledad parlamentaria». «Nadie se fía del señor Rodríguez Zapatero, ha engañado a todos», subrayó.

«Nosotros tenemos la obligación de intentar que lo que necesita España y él no hace, se haga. Tiene que ser el objetivo básico para los próximos meses». Éste fue uno de los mensajes que lanzó Rajoy a sus senadores en la reunión del Grupo Parlamentario Popular de la Cámara Alta, acompañado de su secretaria general y senadora, María Dolores de Cospedal, y del portavoz del grupo, Pío García-Escudero.

Rajoy entregó a los senadores el plan anticrisis aprobado ayer por el comité de dirección del PP, con medidas en doce capítulos que van desde la reforma de la Administración hasta la educativa o de la Justicia y que deben ser «la hoja de ruta» del trabajo parlamentario en los próximos meses. Ayer se mostró confiado en las posibilidades de acuerdo del PP para sacar adelante tanto estas iniciativas como las de otros partidos «que sean buenas para los españoles», dada la soledad de un Gobierno que ha perdido la confianza de los agentes sociales, los ciudadanos y sus antiguos socios.

No descartó tampoco que el propio Ejecutivo estudie las propuestas del plan anticrisis del PP, «cuando el señor Rodríguez Zapatero deje de hacerse fotos y de salir en las televisiones reuniéndose consigo mismo y con sus ministros». Porque a esto último, a la imagen, se sigue dedicando el Gobierno, censuró Rajoy, cuando el país necesita «reformas estructurales». El plan anticrisis del PP las recoge y dice a los españoles la verdad de la situación, defendió.

«Es necesario abandonar el vicio del presidente de negar la evidencia», dijo. «Hay que volver a decir la verdad a los españoles, restaurar la confianza explicando la dimensión nacional de la crisis», proclamó.

Rajoy repasó los resultados electorales del PP en Galicia y el País Vasco para ponerlos como ejemplo de cómo afrontar la próxima cita europea. «Las cosas hoy van bien para nosotros. Las expectativas son buenas, podemos tener un buen resultado, pero eso no sirve para nada, es sólo un acicate más para trabajar», advirtió, para pedir el máximo compromiso de cargos públicos y afiliados en la campaña.