El ex presidente del Gobierno y presidente de FAES, José María Aznar, convocó ayer a los vicepresidentes y ministros que conformaron el primer Ejecutivo 'popular' tras la victoria electoral de 1996, un encuentro que se convirtió en un acto de apoyo al cabeza de lista del PP al Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja, que dirigió el Ministerio del Interior en aquel gabinete del PP.
El almuerzo, que se celebró en un céntrico hotel madrileño, contó con la asistencia del presidente del PP, Mariano Rajoy, que ocupó varias carteras en los gobiernos de Aznar; el ex vicepresidente y ex ministro de Fomento Francisco Àlvarez-Cascos y el ex vicepresidente económico y ex director del FMI Rodrigo Rato.
También acudieron a la cita del PP los ex ministros Margarita Mariscal de Gante, Josep Piqué, Abel Matutes, Eduardo Serra, Rafael Arias-Salgado, José Manuel Romay Beccaria, Esperanza Aguirre e Isabel Tocino. El que fue ex ministro de Trabajo Javier Arenas no pudo asistir al almuerzo debido a que estaba presente en la sesión de investidura de José Antonio Griñán como presidente de la Junta de Andalucía.
Las Juventudes Socialistas (JSE) consideran, por su parte, que el acto supone una desautorización a Mariano Rajoy.
En un comunicado, el secretario general de los jóvenes socialistas, Sergio Gutiérrez, opina que el acto ha sido una «nueva demostración de fuerza» por parte de Aznar.
Para las JSE, «sólo el incontrolable deseo de Aznar de dejar claro quién manda de verdad en el PP compensa el silencio cobarde de Rajoy».
La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, afirmó que el ex presidente del Gobierno José María Aznar «pretende reencarnarse» por medio del cabeza de lista del PP a las europeas, Jaime Mayor Oreja, para «volver a primera línea de la vida pública».
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