Alfredo Perez Rubalcaba y Carme Chacón, durante el Congreso. | Marcelo del Pozo

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Los candidatos a liderar el PSOE Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón se han besado públicamente al acceder al plenario del 38 Congreso Federal del partido, pero fuera se han evitado y no han intercambiado palabra en los prolegómenos.

Rubalcaba y Chacón han entrado en la sala en la que se desarrolla el Congreso junto al resto de miembros de la actual Ejecutiva, con José Luis Rodríguez Zapatero a la cabeza, y han sido recibidos con un prolongado aplauso de los delegados.

Ha sido al ocupar los sitios que les corresponden a ambos como miembros de la dirección del partido, al lado uno del otro, cuando se han besado y han intercambiado unas breves palabras.

Sin embargo, antes de acceder al plenario ni siquiera se han saludado.

Todos los miembros de la Ejecutiva se han reunido en un punto concreto del hotel en el que se desarrolla el Congreso y Zapatero ha estado departiendo con los que han formado parte de su dirección.

Hasta allí ha acudido primero Chacón, quien ha mantenido varios corrillos con otros dirigentes de la cúpula socialista, entre ellos Eduardo Madina, Juan Fernando López Aguilar, Pedro Zerolo o Andrés Torres Mora.

Unos diez minutos más tarde ha acudido al lugar de la cita Rubalcaba, que ha saludado a varios miembros de la Ejecutiva y ha tenido varios interlocutores, como Rodolfo Ares, Madina o Manuel Chaves, pero en ningún momento ha conversado con Chacón.

Zapatero

El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha sido acogido con una gran ovación por los delegados que participan en Sevilla en el 38 Congreso federal del PSOE, donde precisamente será relevado de su cargo de secretario general.

Ha sido durante el discurso del secretario de Organización del partido, Marcelino Iglesias, que ha abierto el Congreso, cuando Zapatero ha sido aplaudido por los delegados, muchos de ellos puestos en pie.

«No hay ninguna política de avances, de modernización y de progreso en los últimos 30 años, desde el inicio de la democracia, que no lleve el cuño del PSOE, de sus grandes presidentes, como Felipe González o José Luis Rodríguez Zapatero», ha dicho Iglesias.

Al nombrar a González, los delegados han aplaudido, pero la ovación ha sido bastante más prolongada cuando Iglesias ha mencionado el nombre del todavía secretario general del partido.