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La participación en las elecciones catalanas del 21D ha alcanzado en esta jornada un récord histórico del 82 por ciento , 7 puntos más que en las autonómicas de 2015, cuando ya se batieron todas las marcas anteriores, en unos comicios caracterizados por una fuerte polarización del electorado.

La pugna entre partidarios y contrarios a la independencia de Cataluña y la incertidumbre sobre cuál de los dos bloques obtendría más votos y escaños ha llevado a esta insólita movilización de los electores en un día laborable, una jornada que por otra parte ha transcurrido con normalidad, buen tiempo y sin incidencias destacables.

Esta gran participación, que ya habían augurado la mayoría de las encuestas, ha logrado batir incluso el récord ded todas las contiendas electorales celebradas en España, el 79,9% de las generales de 1982, cuando triunfó el PSOE liderado por Felipe González, en una jornada también en día laborable.

El hecho de que las elecciones no se hayan celebrado en día festivo ha propiciado que los ciudadanos hayan desplazado el momento de ejercer el voto a horas más tardías y, así, a las 13:00 horas se situaba en el 34,7 %, una cifra elevada pero que representaba un 0,4 menos que en 2015.

En cambio, a las 18:00 horas se había llegado ya al 68,32 por ciento del censo, un aumento de un 5,2 % respecto a las autonómicas de 2015, cuando se registraba a esa hora un 63,12 por ciento.

La mayor participación se ha registrado en la provincia de Barcelona, donde más del 82 % de los electores ha depositado su voto, siete puntos más que hace dos años.

En Barcelona ciudad la participación ha sido algo menor, de un 81,5 por ciento, y un aumento de cuatro puntos y medio, pues en el año 2015 alcanzó un 77,08 por ciento.

La circunscripción de Girona ha sido la segunda en participación, con un 81,5 por ciento del censo y un aumento de un 5,5 por ciento con respecto a 2015.

Por su parte, Lleida ha registrado una participación de un 80,6 por ciento, siete puntos con respecto a las anteriores elecciones, cuando llegó al 73,63 %, y en Tarragona ha sido del 80,4 %, más de seis puntos sobre 2015, cuando la circunscripción tarraconense llegó al 74,19 %.

Todos los partidos se han felicitado por la gran movilización ciudadana de estos comicios y, en este sentido, el portavoz de ERC, Sergi Sabrià, ha dicho que las elecciones del 21D han sido convocadas de forma «ilegal» por lo que son «ilegítimas», si bien la alta participación de los catalanas «legitima» los resultados.

Junts per Catalunya ha celebrado la «altísima» participación en estas elecciones y sus portavoces han manifestado «orgullo por un país que se acerca masivamente» a votar, al tiempo que ha manifestado su convencimiento de que «el 155 morirá en las urnas.

El secretario general de C's, José Manuel Villegas, ha aplaudido la «normalidad democrática» de la jornada, ya que se planteaba como «complicada, tensa y polarizada», así como los datos «históricos» de participación.

El candidato del PSC, Miquel Iceta, ha celebrado asimismo la alta movilización en la jornada electoral catalana, y ha destacado que «cuanta más participación, más alegría para todos los demócratas».

El número tres del PPC por Barcelona, Santi Rodríguez, ha celebrado igualmente la alta participación en las elecciones catalanas, lo que evidencia la «gran implicación» de los catalanes en la situación política y en intentar salir de la situación que ha vivido Cataluña en los últimos meses.

La número 2 de la lista de Catalunya en Comú-Podem, Elisenda Alamany, ha subrayado la «participación histórica», que valoran «muy positivamente», más después de «los meses tan duros y delicados que hemos vivido últimamente».

La portavoz de la CUP Núria Gibert ha calificado como una «buena noticia» el aumento de la participación en estos comicios con respecto a los de 2015, a pesar de que la campaña haya sido «injusta», «desigual» y con «las cartas marcadas.

Incidentes

El secretario técnico del Ministerio del Interior, Juan Antonio Puigserver, ha explicado, desde el centro de difusión de datos instalado en Fira Barcelona, que los escasos incidentes que se han detectado a lo largo del día -la constitución tardía de alguna de las mesas o la falta de material en momentos puntuales- son los propios de cualquier jornada electoral, e incluso se han dado «en una proporción más baja» que en otros comicios.

Ha dicho que desconoce si ha habido intentos de ciberataques contra Indra, la empresa tecnológica responsable del recuento de los votos este 21 de diciembre: «Lo que sí puedo asegurar es que el sistema de estas elecciones funciona sin ningún problema».

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