El Citroën Ami es un microcoche eléctrico que se podrá conducir con este nuevo carnet.   

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La Estrategia de Seguridad Vial 2030 prevé una serie de medidas de actuación para reducir en un 50 por ciento el número de personas fallecidas y heridas graves en siniestros viales respecto a las cifras de 2019, entre las que destaca la incorporación de la educación en movilidad segura y sostenible en el currículo escolar de forma progresiva a partir del próximo curso, un nuevo permiso de conducir B1, a partir de los 16 años, o nuevos test psicofísicos. Así lo ha explicado el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, durante la presentación este jueves en la sede de la Dirección General de Tráfico (DGT) de la Estrategia de Seguridad Vial 2030, «un compendio de directrices, una hoja de ruta que guiará la actuación de las administraciones públicas, las asociaciones y entidades del sector, el mundo empresarial y el académico, durante la presente década».

En su intervención, el ministro ha señalado que la estrategia se articula en torno a nueve grandes áreas estratégicas que, a su vez, se despliegan en 62 líneas de actuación que se irán definiendo en los sucesivos planes bianuales. Además, ha puesto de relieve la relevancia del mecanismo de planes bienales porque concreta las medidas a ejecutar en cada periodo. Del Plan de Actuación Especial para 2022-2023, Grande-Marlaska ha destacado algunas medidas como la puesta en marcha del título de Técnico Superior en Movilidad Segura y Sostenible de Formación Profesional ya creado por el Ministerio de Educación, y la revisión y actualización del protocolo de pruebas de aptitud psicofísicas en los centros de reconocimiento médico de conductores, inalterado desde el año 2007.

Otra medida importante para el titular de la cartera de Interior es el uso obligatorio del airbag para las pruebas de circulación en moto en los exámenes de conducir para el permiso A, es decir, las motos de alta cilindrada. «Estamos comprometidos con la promoción del airbag para los motoristas de motos de alta cilindrada porque supone un paso adelante en la protección de los mismos», ha subrayado. En este punto, Grande-Marlaska ha anunciado que, tras el correspondiente proceso de prospección de mercado, «en breve» licitarán la adquisición general de airbags para los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.

Otra iniciativa será promover los exámenes de los turismos con cambio automático, pues, «en la actualidad, el 98 por ciento de los exámenes de conducir se realizan en vehículos con cambio manual». «Modificaremos el Reglamento de Conductores para potenciar y facilitar el uso de vehículos con cambio de marchas automáticos a fin de familiarizar a los nuevos conductores con el vehículo eléctrico», ha remachado. De acuerdo con lo previsto en la Directiva Europea de permisos de conducir, el ministro ha apuntado que se regulará un nuevo permiso de conducir B1, a partir de los 16 años, para vehículos eléctricos con velocidad máxima de 90 kilómetros hora y peso máximo de 400 kilogramos. «Ya está en aplicación en países como Francia con buenos resultados y favorecerá la movilidad de los más jóvenes en el ámbito rural, donde aun con todos los esfuerzos, evidentemente el transporte público no llega en las mismas condiciones», ha declarado. Respecto a los cursos de Conducción Segura y Eficiente para motos y turismos, incluidos en la Ley de Tráfico como un instrumento que permitirá a los conductores recuperar dos puntos de su saldo si los realizan, la Orden Ministerial que los desarrolla está prevista para finales de este año. El titular de la cartera de Interior ha confesado que el trabajo que hay por delante es «abrumador», pero al mismo tiempo «estimulante». «Vamos a ayudar a las ciudades españolas de más de 50.000 habitantes a que antes de fin de año pongan en marcha sus zonas de bajas emisiones. Vamos a ordenar el uso de Vehículos de Movilidad Personal (VMP), a través de la reforma del Reglamento de Circulación para la protección de los usuarios vulnerables y regularemos el seguro obligatorio de responsabilidad civil», ha adelantado.

En coordinación con los ayuntamientos, se van a establecer parámetros cómo la edad mínima, el uso del casco, el equipamiento o el seguro obligatorio, todo ello quedará regulado en el Reglamento de Circulación para proteger a los usuarios vulnerables. Asimismo, el ministro ha afirmado que se va a hacer una apuesta «decidida» por el vehículo conectado a través de DGT 3.0, porque «es la gran apuesta del futuro, sin duda alguna, para la seguridad vial», así como se incorporará a la normativa española la Directiva Europea sobre gestión de la seguridad de las infraestructuras viarias, «lo que generará un amplio catálogo de intervenciones en el diseño de nuestra red viaria, como la ampliación de los tramos 2+1 en las carreteras secundarias o convencionales o la actualización del catálogo de señales». En este periodo también se procederá a la revisión y actualización de los plazos de renovación de los permisos de conducir de acuerdo con lo previsto en la Directiva Europea de Permisos de Conducir, ampliándolo para los jóvenes y reduciéndolo para los mayores. Grande-Marlaska ha afirmado que esta nueva estrategia nace de la experiencia acumulada en el último decenio, del análisis de las políticas europeas y las más significativas directrices de distintos organismos internacionales y del trabajo de análisis y reflexión realizado en el seno del Consejo Superior de Tráfico y Seguridad Vial.

«Aúna la visión de organismos supranacionales y nacionales, porque siempre he defendido que la política de seguridad vial no debe ser de un ministerio, ni siquiera de un gobierno: nos concierne a todos, es una responsabilidad de todos y tenemos que diseñarla de consuno con el mundo globalizado en que estamos», ha añadido el ministro del Interior. Según ha señalado Marlaska, para la elaboración de la estrategia, se han tenido en cuenta factores como el cambio climático, el envejecimiento de la población, la apuesta por la sostenibilidad por parte de los más jóvenes, la incorporación de los avances tecnológicos o la consolidación durante este decenio del denominado 'sistema seguro', una nueva visión sobre el origen y la prevención de los siniestros viales. El director general de Tráfico, Pere Navarro, ha recordado que los desplazamientos de largo recorrido han aumentado a valores superiores a los registrados en 2019 (+2%) y se ha producido un incremento de las víctimas mortales. Entre enero y mayo han fallecido en las carreteras 439 personas, 24 más (+6%) que en 2019. Navarro ha declarado que las medidas del plan bianual «tienen que ayudar a frenar este ligero aumento de la siniestralidad». «Estamos convencidos de que solos no podemos lograrlo. La seguridad vial necesita la colaboración de todos los ciudadanos, porque el comportamiento de cada uno en carretera tiene consecuencias directas en el resto de actores que comparten la vía. Respetemos las normas de tráfico, porque entre todos sumamos seguridad vial y entre todos sumamos vida», ha zanjado.