Varias empresas de alquiler de motos y bicicletas exponen sus vehículos en la primera línea de la Platja de Palma sin tener autorización para ello.

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Las motos y bicicletas de alquiler han ocupado la primera línea de la Playa de Palma. Vecinos y empresarios de la zona denuncian que hay negocios destinados al alquiler de estos vehículos que se expanden en la vía pública de forma ilegal.

Por un parte, advierten que se trata de una competencia desleal para el resto de empresarios que pagan impuestos y no sacan sus productos a la calle, sino que se limitan a trabajar en el interior de sus establecimientos.

Por otra, critican que están privando a toda la ciudadanía, a residentes y también a turistas, de disfrutar de la vía pública.

Como se observa en la fotografía, las bicicletas y motos se aparcan en la vía pública, lo que sirve de reclamo a los posibles usuarios, ya que se topan con ellas cuando van por la calle sin necesidad de tener que entrar en el interior de los negocios. Además, cuentan con más espacio para poder exponer de una forma más atractiva los vehículos.

Los afectados denuncian que han llegado a contabilizar unos 300 vehículos estacionados en la primera línea de la Platja de Palma; puntualizan que en las fotos se ven menos porque cuando fueron realizadas muchos ya habían sido alquilados.

Vecinos y empresarios de la Playa de Palma explican que se trata de un fenómeno nuevo que se ha producido este año; confiesan que están muy preocupados. En este sentido, precisan que a principios de año una empresa de alquiler de vehículos empezó a exponerlos en la vía pública y al ver que el Ajuntament de Palma no lo impedía le fueron siguiendo otras. Actualmente, aseguran que hay una decena de negocios de alquiler que están cometiendo estas irregularidades.

Informe

La Policía Local es consciente de esta problemática y ha solicitado un informe al departamento de Govern Interior para esclarecer si se trata de una extensión ilegal de la actividad a la vía pública o de estacionamiento de vehículos. En el primer caso podría producirse una retirada de las motos y bicis; en el segundo, se aplicaría la ordenanza de circulación o el código de circulación y se pondrían multas. Los agentes aseguran que están a la espera del informe para actuar.