Vista de viendas en Palma. | Pere Bota

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El Plan General de Palma se ha encontrado con un escollo insalvable que amenaza con acabar en los tribunales y alargar su redacción varios años más. El Ajuntament de Palma anunció este martes su decisión de rescindir el contrato con Territorio y Ciudad, empresa externa que se encargó de redactar el Plan General (cuya parte estructural se aprobó en abril de 2023) y estaba finalizando el Plan de Ordenación Detallada (POD), ahora con el nuevo equipo de gobierno, que ya desde la oposición se ha mostrado muy crítico con el Plan General impulsado por el Pacte de Progrés.

Las razones que dio el concejal de Urbanisme, Óscar Fidalgo, para tomar esta decisión han sido «los incumplimientos constantes» de la empresa jerezana, que está especializada en redactar planes generales en muchas ciudades de España. «La empresa ha tenido muchas reuniones con Urbanismo pero el nivel de incompetencia ya es intolerable», dijo Fidalgo.

Por su parte, Sebastián Olmedo, CEO de Territorio y Ciudad, defendió el trabajo que la empresa llevado a cabo desde 2018 y advirtió que «se están enfrentado a un problema gordo, porque van a tener que empezar de nuevo el Plan. En todo caso pueden haber iniciado el expediente pero no hay rescisión. Nosotros vamos a mostrar nuestra disconformidad. No se podrá rescindir el contrato hasta que se manifieste el Consell Consultiu autonómico y, si no hay acuerdo, iremos a un contencioso administrativo».

Desde Territorio y Ciudad han mostrado su sorpresa ante la decisión unilateral del actual equipo de gobierno municipal. «Nosotros entregamos el 10 de enero el Plan de Ordenación Detallada (POD), que tenía que ir a exposición pública, y desde entonces no hemos vuelto a tener noticias de Gerencia de Urbanismo para hacer cualquier subsanación», señaló Olmedo.

«Nos parece un poco fuerte atacar a nuestra reputación», insistió Olmedo, cuya empresa se ha encargado de los planes generales de Sevilla, Huelva, Alcorcón o Mérida, y está elaborando además el Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía.

Olmedo reconoció que había «una situación tirante» con el Ajuntament, que además aún debe una importante cantidad a la empresa. «Ha habido momentos en los que el 80 por ciento de nuestro personal estaba dedicado exclusivamente a Palma», afirmó el CEO de Territorio y Ciudad, que ya en julio «ofrecimos al nuevo Consistorio una rescisión de mutuo acuerdo por si había desconfianza en nuestro trabajo» tras el cambio de gobierno. Olmedo afirmó con contundencia que «nosotros hemos realizado un trabajo y vamos a defenderlo. Y vamos a comprobar la documentación que hemos entregado, porque no van a poder hacer uso de ella».

El actual equipo de gobierno se ha referido en muchas ocasiones a las más de 900 alegaciones que ha recibido el Plan General de Palma, a lo que Olmedo ha señalado que «se trata de una cifra que no es relevante. Hay planes en los que se han presentado hasta 14.000 alegaciones en municipios de solo 2.000 habitantes. En la actualidad hacemos planes en los que desde el minuto 0 se comparten documentos con la ciudadanía para que hagan sus aportaciones».

La regidora de Més, Neus Truyol, también mostró su sorpresa al conocer la decisión del equipo de Urbanismo de rescindir el contrato con Territorio y Ciudad. Truyol mostró sus dudas de que el equipo de técnicos de Urbanisme pudieran asumir la redacción del Plan, «no por su valía, que es mucha, sino porque son muy pocos para llevar a cabo un Plan General tan grande». En todo caso, la que fuese regidora de Urbanisme en la legislatura pasada, advirtió que «si aprueban el plan, será sin grandes aspiraciones, muy básico y que liberalice».

Truyol recordó que en el POD se regulaba la limitación de bares y restaurantes, la ampliación del catálogo de edificios protegidos, la protección de barrios tradicionales, la limitación de salas de juegos y apuestas, el alquiler turístico, la aparición de nuevos hoteles, la posible expropiación para hacer equipamientos o edificios de viviendas, la regulación de las vallas publicitarias o el crecimiento en altura de los edificios.