Imagen de archivo de la campaña ‘Silenci, Respecte, Civisme’ de Barri Cívic Santa Catalina que se expandió por la ciudad a causa del ruido del ocio nocturno. | Gemma Marchena

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Cort ha decretado el cierre temporal para los dos locales del Paseo Marítimo denunciados por ruidos, los mismos por los que el Ajuntament ha sido condenado por un Juzgado de lo Contencioso. El concejal de Medi Natural, Llorenç Bauzá, ha informado este lunes de que uno de los locales está ahora mismo cerrado porque tiene una sanción firme de tres semanas, mientras que para el otro se ha propuesto un cierre de seis semanas más una multa económica, pero en este segundo caso el castigo aún no se ha ejecutado porque el propietario lo ha recurrido.

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Este viernes trascendía que un Juzgado ha condenado al Ajuntament por su «inoperancia» a la hora de hacer cumplir la norma en estos locales. Bauzá se ha defendido asegurando que muchas quejas «provienen de 2022» y que hasta la llegada del PP «no se habían transformado en expedientes sancionadores y cierres temporales del local». En este sentido ha resaltado que los dos establecimientos acumulan una decena de actas de sanción correspondientes a sus primeros meses de gobierno. Por ello ha afirmado que han puesto «control al descontrol que había hasta ahora».

El regidor ha querido subrayar su «compromiso firme y evidente para garantizar el descanso y el derecho al bienestar de los ciudadanos de Palma», destacando el incremento de presencia policial de 23.00 a 05.00 horas o la creación de una comisión específica para el Paseo Marítimo. Al preguntar si el Ajuntament recurrirá la sentencia del Juzgado, Bauzá se ha limitado a reiterar que Cort «lo que hará es cumplir para garantizar el descanso» de los residentes. «Queremos que las personas que incumplen y no acatan las normas lo paguen», ha insistido.