Sant Sebastià 2025

Irene Montero defiende el polémico cartel de Sant Sebastià: «Nunca más callades ni invisibles»

La eurodiputada de Podemos sale al paso de las críticas a la imagen elegida para ilustrar la celebración LGTBIQ+ y defiende el derecho de este colectivo a tener su espacio en las fiestas

Imagen de archivo de Irene Montero.

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La polémica por el diseño y el cartel elegido para la celebración del Sant Sebastià Q+, encuentro organizado por Podemos y que da visibilidad y un espacio al colectivo LGTBIQ+ en el marco de la festividad del patrón de Palma, ha llegado mucho más allá de la ciudad. Al cruce de opiniones en los medios y las redes sociales desde el Ajuntament y diversas fuerzas políticas respecto al cartel de la artista Lluïsa Febrer con motivo de la Revetla que tendrá en la plaza Santa Eulàlia. se han sumado figuras de la política nacional.

El próximo día 19 de enero, a partir de las 19.00 horas, se celebrará la Santa Punxada para celebrar «Sant SebastiàQ+. Es patrona y patrón de la comunidad gay y, parece mentira, pero nunca la Revetla de Palma se ha tenido en cuenta como factor esencial e importantísimo en su programación y en su carácter», ha señalado Víctor Conejo en sus redes sociales, encargado de organizar esta cita.

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Ante la polémica surgida, con declaraciones contundentes por parte del alcalde de Palma que lo tildó de «vomitivo», siendo respondido por la regidora de Podemos en Palma, Lucía Muñoz en redes tras las denuncias presentadas por Abogados Cristianos o el movimiento Desokupa, ha entrado en escena Irene Montero. La dirigente nacional de Podemos y actual eurodiputada de la formación morada ha expresado su opinión a través de la red social X.

«Lo que realmente ofende a Abogados Cristianos no es el maravilloso cartel de Lluïsa Febrer, sino que las personas LGTBIQ+ de Palma tengan un espacio seguro para ser quienes son, disfrutar de las fiestas patronales y subirse a los escenarios. Nunca más callades ni invisibles», decía Montero en X (antes Twitter. Unas palabras que le han valido apoyos por parte de sus más próximos, pero también una cascada de críticas.