El Ajuntament de Llucmajor negó ayer que el traslado del celador
del colegio público Jaume III, Juan Carlos Huguet, que ha sido
destinado a limpiar los contenedores de las urbanizaciones
costeras, no responde a ningún motivo político ni tampoco porque el
celador se manifestase el viernes con otros padres para reivindicar
mejoras en el centro docente.
Sebastià Artigues (PP), delegado municipal de Servicios
Generales, explicó que «este señor trabajaba antes en la limpieza
de contenedores en Bahía Grande y Bahía Azul. Hace un mes, al
enfermar el celador, se le destinó a él para ocupar su puesto de
provisionalmente. Pero resulta que los contenedores de las
urbanizaciones llevaban 15 días sin limpiar y por este motivo se
envió a Huguet. No tiene nada que ver que participara en la
manifestación».
Artigues también explicó que el Ajuntament envía a los puestos
de celador a la gente de la brigada más mayor porque es un trabajo
menos pesado. «Si el claustro de profesores y los padres nos lo
piden reconsideraremos que Huguet vuelva al colegio», añadió.
El sindicato CNT en un comunicado denuncia la «actitud represora
del Ajuntament de Llucmajor . Castigar a un empleado por sus ideas
parece propio de otros tiempos».
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