La Associació Amics de Foravila, uno de los colectivos de
propietarios de grandes fincas más críticos con las Directrices de
Ordenación del Territorio (DOT), vaticina un castigo electoral para
el Partido Popular (PP) si no se modifica la filosofía del proyecto
de directrices.
Monserrat Galmés, presidente de Amics de Foravila, en
declaraciones a Ultima Hora Radio-Part Forana
manifestó ayer: «Queremos saber quiénes son nuestros amigos y
quiénes no. Queremos conocer quiénes están con nosotros y quiénes
no lo están. De bien nacido es ser agradecido y nosotros tenemos la
oportunidad cada 4 años de agradecer o demandar. Creo que con estas
palabras está dicho todo». Galmés también apuntó que «queremos que
se mantenga el concepto de propiedad privada tal y como lo estipula
la Constitución, cosa que las DOT lo dejan en suspenso. Hablan de
gestionar territorios que son de una propiedad privada y esto los
propietarios difícilmente lo podemos admitir».
Sobre la reunión mantenido el pasado sábado con el presidente
del Govern, Jaume Matas, el presidente de Amics de Foravila declaró
sentirse muy pesimista: «Veo casi imposible un acuerdo con esto de
las DOT. Hay dos lecturas, la nuestra y la del Govern, y no
coinciden. Encuentro que tienen mucho intervencionismo y dejan poco
lugar a la iniciativa privadas».
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