La directora del parque, Joan Xamena, ha manifestado que la
oficina de recepción contabilizó el año pasado 84.000 visitantes, a
los que se deben sumar el conjunto de personas que no se dirigieron
a la oficina, cifrado en más de 15.000 individuos. A pesar de todo,
Xamena indicó que «es del todo necesario elaborar un estudio serio
sobre la capacidad de visitas que puede soportar el parque».
Desde la formación ecologista del GOB se ha advertido en
repetidas ocasiones que s'Albufera se está transformando de forma
progresiva en una zona de oferta complementaria turística no
especializada. La masiva afluencia de visitantes, según el GOB,
provoca que s'Albufera esté perdiendo su naturalidad, un elemento
clave de cualquier espacio natural. Las cifras que manejan los
ecologistas elevan hasta 125.000 las personas que durante el 98
visitaron s'Albufera, sin contar la zona de playa.
El Plan de Uso y Gestión también advierte que las visitas
colectivas o escolares, y en general de grupos de más de 15
personas, tienen que ser objeto de concertación previa. Además, el
acceso al interior de las zonas húmedas y de la vegetación que vive
en ellas únicamente se permite por motivos de estudio o gestión, y
previa autorización del director conservador. También la
circulación a caballo o con medios mecánicos fuera de los caminos
queda prohibida salvo en casos justificados.
La pesca de la anguila con cucada se podrá autorizar entre el 1
de julio y el 16 de enero, y limitar en función de las
circunstancias de cada año.
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