La identificación de los perros mediante microchips subcutáneos,
que será obligatoria a partir del mes de junio del 2000, fue una de
las cuestiones que se debatieron en la reunión que mantuvo en Inca
anoche el conseller d'Agricultura, Joan Mayol, con los concejales
de Agricultura de los 53 ayuntamientos de la Isla.
Mayol, acompañado de parte de su equipo técnico, informó a los
responsables municipales sobre todas aquellas cuestiones que
dependiendo de la Conselleria d'Agricultura obliga a una
implicación directa de los consistorios.
Referente a los microchips obligatorios para perros, se informó
del convenio firmado con el Colegio de Veterinarios merced al cual
los microchips serán subvencionados con el objetivo de que el
precio máximo que deban pagar los propietarios de los animales sea
de 3.700 pesetas. Hasta ahora, esta obligatoriedad sólo se daba en
algunos municipios, con desigual aceptación.
Sin embargo, los asistentes pusieron más interés por la
subvenciones para mejoras de caminos rurales. En este sentido
surgió el problema de la financiación con fondos europeos, a través
del nuevo programa operativo de Desarrollo Rural Objetivo II, que
sustituirá a los objetivos 5B y B2 que funcionaban hasta ahora.
Mayol explicó que la lista no oficial que había podido conseguir,
confeccionada por el anterior Ejecutivo autonómico, excluía a
muchos ayuntamientos hasta ahora incluidos en el 5B o el B2, como
Inca, Campanet o Mancor, por ejemplo.
La recogida de plásticos y residuos agrarios y su posterior
reciclaje fue otra de las cuestiones planteadas.
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