El Ajuntament d'Inca ha vuelto a colocar una bandera española en el
balcón de la Casa Consistorial tras el acto vandálico ocurrido el
pasado viernes por la noche. Unos desconocidos quemaron la enseña
española, que se encontraba a media asta como muestra de luto por
la muerte de la madre del Rey, Doña María de las Mercedes de
Borbón.
Ayer, la Policía Municipal desconocía la identidad de los
autores de este acto de vandalismo. No obstante, el sargento indicó
a este periódico que estaba totalmente descartado que fuera un acto
reivindicativo de grupos independentistas: «Los más probable es que
hayan sido unos gamberros; hay días que les da por echar jabón a la
fuente y este fin de semana les ha dado por quemar la bandera
española».
El sábado mismo el Ajuntament d'Inca procedió a la colocación de
una nueva bandera española en la Casa Consistorial, que ha costado
unas 20.000 pesetas a las arcas municipales. «En caso de encontrar
a los autores no se les podría hacer nada, salvo hacerles pagar el
coste de la enseña, porque la quema de banderas está
despenalizado», preciso el sargento de la Policía Local.
La bandera española está colocada junto a la de la Comunitat y
la de Inca. El viernes, el mástil de la española estaba más bajo
que el resto y era más fácil acceder a ella.
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