El Ministerio de Fomento ha retrasado hasta el mes de mayo el
inicio de las variantes de Vilafranca y Capdepera, a pesar de que
estos proyectos, junto con el desdoblamiento de la carretera de Son
Ferriol, están adjudicados en un mismo paquete desde hace meses a
la Unión Temporal de empresas Sato-Baseosa. Estas obras están
incluidas en el convenio de carreteras suscrito por el Ejecutivo
balear con el Gobierno central.
De hecho, la Administración central ha destinado este año sólo
243 millones de pesetas para la ejecución de estos proyectos, cuya
adjudicación se produjo por 1.243 millones de pesetas. El resto del
presupuesto, 1.000 millones, se invertirá en el 2001. Josep Antoni
Ferrer, conseller d'Obres Públiques, indicó ayer a este diario que
el hecho de que el Ministerio de Fomento dé tan poco dinero para
ejecutar estas obras evidencia que, en su presupuesto, «no dispone
del dinero».
A su juicio, esto constituye una prueba de que el Govern no
perderá el dinero del convenio tal y como se ha especulado. «Es un
falso debate puesto que ni Madrid asigna las partidas globales de
los proyectos. Esto ya pasó en Canarias y no se perdió el dinero»,
aseguró.
La ejecución de las variantes de Vilafranca y Capdepera, así
como el desdoblamiento de la carretera de Son Ferriol, salió a
concurso en el mes de abril del año pasado y las plicas se abrieron
en julio. Poco después tuvo lugar la adjudicación. Estas serán las
primeras del obras convenio que se ejecuten en Mallorca.
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