Las antiguas canteras de Muro desaparecen bajo toneladas de escombros

Aunque el único vertedero legal de Mallorca es el que EMAYA posee en Son Reus, el regidor del PSM de Muro, Pau Mateu, ha denunciado que «desde que han parado los vertidos en Palma muchas empresas están tirando los escombros en Muro». En este municipio existe un flujo constante de vehículos que se dirigen hacia las antiguas canteras de Son Morey y Son Font, entre otras, para poder continuar con sus trabajos.

Algunas canteras ya están completas y los escombros se acumulan en grandes montañas. A los residuos sólidos de obra se unen además todo tipo de residuos tóxicos que empresas y vecinos depositan en la zona en lo que Mateu califica como «una falta de civismo».

Desde el PSM solicitan al equipo de gobierno que detenga la actividad en estas canteras y defienden la recuperación de las mismas como patrimonio etnológico dentro del pueblo. De hecho, aún hoy perduran algunas canteras que fueron recuperadas como campos de cultivo.

Gracias a sus especiales características, las canteras reúnen condiciones favorables para la agricultura. Algunas de estas pedreres, como la de Sant Antoni, conservan hoy un espectacular paisaje que da idea del que se esconde bajo toneladas de escombros en una decena de enclaves de Muro. «Incluso se han edificado chalets sobre canteras cubiertas de residuos», explica Mateu.

Las pedreres supusieron una fuerte actividad económica en el municipio de Muro en unos años de crecimiento urbanístico en los que el marès era una materia básica. Una vez explotadas y cerradas aquellas canteras muchas se convirtieron en vertederos de residuos sólidos no tóxicos a los que en los años sesenta y setenta se añadieron residuos contaminantes. Durante la década de los ochenta, las empresas de recogida de residuos urbanos las comenzaron a utilizar como vertederos y desde entonces los problemas no han cesado. En verano, algunos vertederos combustionan y ya se han producido importantes incidentes con este motivo.