La urbanización de Cala Carbó no podrá desarrollarse antes de dos
años. El Ajuntament ha remitido al Consell de Mallorca dos informes
técnicos y jurídicos que barajan la hipótesis de que esta
urbanización esté incluida en la moratoria aprobada el pasado
verano. El Consell deberá ahora pronunciarse al respecto.
De confirmarse la noticia, el Ajuntament ganaría el tiempo
suficiente para desclasificar Cala Carbó e impedir así la
construcción de cincuenta chalets en la montaña. La noticia llega
tres semanas antes de que expire la suspensión de licencias
impuesta por el Ajuntament hace ahora un año y que entró en vigor
el 25 de febrero de 2000 debido a un error de publicación en el
BOCAIB. Los tres socios del pacto de gobierno (PSOE, PSM y UM)
acordaron el pasado lunes remitir los informes municipales a Palma
con la esperanza de que se ratifique la impresión de los
técnicos.
Cuando el Consell Insular de Mallorca aprobó la moratoria
urbanística para toda la Isla a principios del verano, esta cayó
como un jarro de agua fría en Pollença y es que después de la
suspensión de licencias los socios del equipo de gobierno (PSOE,
PSM y UM) albergaban la esperanza de que el Govern y el Consell se
implicaran en la protección de la montaña, dejando la puerta
abierta para compartir futuras indemnizaciones. El PSOE calcula que
las indeminizaciones podrían rondar los mil millones de
pesetas.
No obstante, una primera lectura de los técnicos revelaba que la
moratoria del Consell de Mallorca dejaba sin protección Cala Carbó
por lo que si el Ajuntament no adoptaba medidas urgentes al
respecto, la urbanización sería posible a partir del 26 de febrero
de 2001, día en que expira la suspensión de licencias. Una segunda
lectura del texto parece revelar ahora nuevos datos y los técnicos
y juristas municipales coinciden al señalar que existe esa
protección.
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