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L. PLANAS/MAR COMÍN «He hecho valoraciones y me he dado cuenta de que los más jóvenes de Binissalem no han conocido a otro alcalde. Si los jóvenes luchan contra lo establecido, yo, en un pueblo en paz, soy el enemigo a batir. Por tanto, es mejor que me retire». Con estas palabras pronunciadas entre colegas de partido y en tono amistoso, el alcalde de Binissalem, Salvador Cànoves (PSOE), anunció ayer públicamente su intención de renunciar, el próximo julio, al cargo de alcalde.

Cànoves quiso aprovechar la reunión entre cargos electos socialistas, celebrada ayer en Binissalem, para dar a conocer «en familia y de forma íntima» que, tras 14 años en el cargo y 18 en el Ajuntament, deja la Alcaldía.

El alcalde de Binissalem aprovechó también para presentar a la persona que propone el partido como candidato para el relevo: el «número dos» de la lista de los socialistas de Binissalem y mano derecha del alcalde, Miquel Nadal. A pesar de abandonar el cargo de alcalde, Cànoves señaló seguirá al lado de sus compañeros de partido de Binissalem y trabajando junto a ellos para seguir mejorando el pueblo.

Una de las principales razones de la dimisión de Cànoves es la dificultad que le supone tener que compaginar dos cargos públicos: la Alcaldía y el trabajo de diputado en el Parlament.