TW
0
JOSEP MARIA SASTRE Las tierras de Llubí y Campos han sido desde tiempos ancestrales prácticamente las únicas de Mallorca que se han caracterizado por el cultivo, producción y comercialización de alcaparras. De un tiempo a esta parte, sin embargo, la fuerte competencia de las tàperes del norte de Àfrica ha afectado al cultivo, puesto que de cada vez hay menos hectáreas, y a la rentabilidad del producto hasta el punto que en Campos casi nadie recoge alcaparras y Llubí sigue el mismo camino.

Ante este oscuro panorama que, según manifestó el conseller d'Agricultura, Mateu Morro, «está a punto de dejar sin futuro al sector», los ayuntamientos de ambas localidades, el Govern de les Illes y la empresa sa Llubinera firmaron ayer un convenio de colaboración para recuperar y fomentar el cultivo de la tàpera. El plan consiste en la apertura de centros de recogida en Campos y Llubí. Otro factor importante a tener en cuenta es que las alcaparras se compren a precios dignos: 600 pesetas el kilogramo de tàpera pequeña y 100 pesetas el kilo de las otras variedades.

En este sentido, el conseller de Comerç y vicepresident del Govern, Pere Sampol, afirmó que es necesario, además, potenciar los procesos de transformación e industrialización de las alcaparras garantizando un precio mínimo que haga rendible la recogida. El titular de Comerç añadió que para lograrlo «es importante realizar un proceso de diferenciación del producto por lo que se impulsará la creación de una denominación de calidad y concienciar a la gente de que los productos de Mallorca son mucho mejores que los demás».

En referencia a esto último, Mateu Morro destacó que la identificación de calidad es importante porque la tàpera de Mallorca tiene «un sabor diferente gracias a su proceso de elaboración y el consumidor tiene que poder diferenciarla en el mercado». La campaña estará encaminada a la divulgación de este distintivo de origen que será apoyada, además, por la publicación de un recetario donde el ingrediente básico sea la tàpera. El convenio de colaboración fue firmado ayer por Morro, Sampol, los alcaldes de Campos y de Llubí, Andreu Prohens y Francesc Bauçà, respectivamente, y el presidente de la SAT sa Llubinera, Miquel Ramis.