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M. F. / T. O. Desde ayer, dos asistentes de hogar contratados por el Ajuntament de Manacor son los que sustituyen la labor que ha realizado durante diez años la Cruz Roja, que tenía destinados un total de doce objetores, además de un refuerzo de voluntariado, para llevar a cabo la asistencia domiciliaria y el reparto de comida en el municipio de Manacor. Anteayer, por falta de un acuerdo económico, terminó el convenio de colaboración entre el Ajuntament de Manacor y la Cruz Roja que realizaba la ayuda a domicilio básica y complementaria, que consiste en ayudar a levantar y acostar a las personas muy mayores o con impedimentos físicos. El colectivo humanitario también realizaba el reparto de comida a domicilio.

Jaume Perelló, presidente de la Cruz Roja de Manacor, ha explicado: «Nuestros servicios iban destinados a unas 40 personas que estaban repartidas entre Manacor, Porto Cristo, Cales de Mallorca y zonas rústicas. La mayoría sobrepasa los 60 años de edad o tienen minusvalías físicas o psíquicas». Perelló expresa que «a parte de estas tareas, los voluntarios de la Cruz Roja también ayudaban en la residencia de personas mayores y estaban con los asistidos».

Margalida Mayol, funcionaria del área de Bienestar Social, explicó que «con el trabajo de los dos auxiliares del hogar, el servicio mejorará al ser más rentable, más ágil, más controlado y con mayor movilidad. Su horario es de 8.00 a 15.00 horas, de lunes a viernes y reparten la comida de 13.00 a 15.00 horas. Además, con la teleasistencia los auxiliares pueden ayudar a 70 personas».

Convenio para el colegio de s'Illot
La Conselleria d'Educació i Cultura del Govern realizará una inversión de casi 263 millones de pesetas en la construcción del nuevo colegio público de s'Illot. El proyecto prevé la construcción de un centro con tres unidades de educación infantil y seis de educación primaria ubicado en un solar de 4.642 m2. El convenio de colaboración entre el Ajuntament de Manacor y la Conselleria fue aprobado el pasado viernes por el Consell de Govern. Así, se atiende una antigua reivindicación de padres y madres que solicitaban un nuevo centro educativo porque el núcleo costero no dispone de unas instalaciones adecuadas. En dos años, la Conselleria d'Educació i Cultura ha invertido más de 600 millones en los centros docentes de este municipio.