La promesa de una inyección de capital podría desbloquear las
negociaciones sobre la regulación de empleo que quiere llevar a
cabo la empresa Majórica para salir de la crisis económica que
padece en estos momentos.
Ayer se celebró una reunión con los dos sindicatos, UGT y CC OO,
y los tres comités de empresa: taller de joyería, fábrica y
tiendas. «La empresa ha demostrado un nuevo talante», afirmó ayer
el sindicalista de UGT Guillem Vadell, «y nos están planteando
diversas propuestas». Una de estas propuestas pasa por plantear la
reducción de la plantilla mediante jubilaciones anticipadas, un
sistema considerado mucho menos impactante que el despido
indiscriminado de 188 empleados.
Por parte de la empresa se anunció que algunos accionistas
estaban dispuestos a realizar una inyección de capital. No
obstante, esta noticia fue recibida por los sindicatos con un
especial escepticismo, al considerar que esto «son sólo palabras» y
exigirán que «esta inyección de capital se notifique por escrito».
«Sólo de esta manera estaremos dispuestos a negociar el expediente
de regulación de empleo», explicaron desde los sindicatos.
La reunión mantenida ayer entre sindicatos y comités fueron muy
largas y tensas y está previsto que continúen a lo largo del día de
hoy.
Por otra parte, el director general de Treball, Fernando Galán,
expresó ayer que mantenía contactos con la empresa Majórica y el
banco que avaló el crédito para la compraventa de la firma, BSCH,
para tratar de resolver la crisis actual.
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