Las palas trabajaban ayer en uno de los diques del puerto de la Colónia de Sant Pere. Foto: T. OBRADOR

TW
0
J.M. SASTRE/ T. OBRADOR Las obras de ampliación del puerto deportivo de la Colònia de Sant Pere (Artà) se han reanudado tras años de haber sido paralizadas por el Tribunal Superior de Justicia a raíz de un recurso presentado por el GOB en 1996, argumentando que se omitió el trámite de información pública de la evaluación de impacto ambiental. Con esta ampliación, cuyo plazo de ejecución es de un año, el puerto deportivo tendrá 220 amarres de base.

El plazo de la concesión al Club Náutico de esta zona costera de Artà se ha establecido en un periodo de 30 años, después de que la dirección de esta asociación haya acatado una serie de condiciones impuestas por la Conselleria de Medi Ambient como, por ejemplo, la redacción de un estudio de impacto ambiental con una cartografía detallada de la Posidonia oceánica y otro del efecto de las embarcaciones en el litoral y el fondo marino. Además, entre otras cosas, el Club Náutico deberá implantar un sistema de gestión ambiental.

Ahora, los trabajos de ampliación se llevarán a cabo hasta la primera semana de junio, después se detendrán para no causar molestias durante la temporada turística y se reanudarán de nuevo a principios del mes de setiembre. Las primeras actuaciones consisten en la pavimentación de la zona de aparcamiento y repasar las piedras que se van a utilizar para construir los diques.

De esta manera, el puerto de la Colònia de Sant Pere ha sido el último en conseguir permiso tras la moratoria de puertos deportivos decretada por el Ejecutivo autonómico que ha paralizado unos seis proyectos y que es el paso previo a la redacción del Plan Director Sectorial de Puertos Deportivos que entrará en vigor en un máximo de tres años, según anunció el director general de litoral, Onofre Rullán. El Grup d'Ornitologia Balear mantiene que la ampliación sigue siendo «absolutamente desmesurada».