La demanda para construir nuevas viviendas en suelo rústico en
Santa Maria del Camí ha caído en picado. Tanto es así, que en los
últimos dos años el Ajuntament no ha recibido ninguna petición de
licencia para obras de este tipo.
La culpa de esta falta de demanda la tienen las medidas de
contención aplicadas en el último bienio. Para empezar, entre el
mayo del 2000 y del 2001 pesó una moratoria en suelo rústico.
La clave la tuvo la modificación de la normativa urbanística
efectuada en julio del 2001. Por este cambio, se pasaba a exigir un
mínimo de tres quarterades (algo más de 21.000 m2) para edificar
cuando hasta entonces se necesitaban sólo dos (14.000 m2). Además,
se limitaba la nueva construcción a un máximo de 450 metros
cúbicos.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.