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El Ajuntament de Santanyí ya dispone del proyecto definitivo para construir un parque urbano que contará con las más avanzadas técnicas medioambientales y que tiene dos objetivos primordiales: la reutilización de las aguas depuradas y la recuperación de los acuíferos.

El proyecto, cuyas obras se iniciarán a mediados del mes de enero, se construirá en un solar municipal de 8.000 m2, situado a la entrada de Santanyí por la carretera de Cala Figuera. «Su ubicación es ideal puesto que estará en frente del polideportivo de Santanyí y al lado de la residencia de la tercera edad», manifestó el alcalde, Miquel Vidal.

La depuradora, que se encuentra a 2 kilómetros del pueblo, dispone de la depuración terciaria y actualmente el agua depurada va a parar al mar. «Cuando se llevó a cabo la red de alcantarillado de Santanyí, ya teníamos prevista la realización del parque urbano, por lo que al mismo tiempo construimos la canalización para devolver las aguas depuradas a estos terrenos para desembocar en una plantación de cañas (pharagmites Australis)», explicó el alcalde.

El proyecto contempla la construcción de dos lagunas: una de 666 m2 y otra de 552. Cuando éstas se encuentren totalmente llenas el agua irá a parar a un pozo de infiltración que contribuirá a la recuperación de los acuíferos.

Tanto en la plantación de cañas, con una superficie de 3.210 m2, como la plantación de populus alba en una extensión de 2.278 m2 y la plantación de tamarix gallica que cubrirá 1.921 m2, se utilizará el sistema de dendrodepuración. Esta técnica consiste en regar los árboles con el agua procedente de la depuradora, los nutrientes son absorbidos por sus raíces y el agua sobrante queda totalmente limpia, como si se realizara otra fase de depuración, y se dirige al pozo de infiltración.

El parque cuenta también con una zona de juegos infantiles que estará rodeada de pinos y otra de ocio para la gente mayor. Asimismo, habrá una zona recreativa con un catafalco para representaciones de teatro, conciertos, etc.

«El parque urbano tiene también un sentido pedagógico puesto que contará con un jardín botánico que rodeará el recinto y donde se sembrarán 40 árboles, cada uno de diferente especie autóctona. También se contempla la representación de la rondalla La flor romania cuyos caminos serán de madera y todo el mobiliario será de material reciclado o natural. Incluso la iluminación estará también integrada puesto que una gran parte estará instalada bajo tierra», concluye el alcalde, Miquel Vidal.