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El Ministerio de Agricultura ya ha enviado al Ajuntament d'Inca el proyecto de aprovechamiento integral de las aguas depuradas del municipio. Actualmente se encuentra en periodo de exposición pública el estudio de impacto ambiental de esta actuación, que prevé que se puedan regar inicialmente más de 187 hectáreas agrícolas del municipio con aguas regeneradas procedentes de la estación depuradora. El proyecto se basa en la creación de una gran laguna de almacenamiento de agua de unos 75.000 metros cuadrados de superficie y una capacidad para 217.000 metros cúbicos de líquido. Esta laguna se construirá junto a la actual estación depuradora, cerca de la carretera de Llubí, en la que el Ibasan tendrá que instalar un sistema de depuración terciaria de las aguas que permita su aprovechamiento para riego agrícola.

Desde esta gran laguna saldrán unos 12 kilómetros de conducciones y tuberías para llevar el agua depurada hasta las fincas que se aprovecharán del proyecto. Los propietarios de dichas fincas, que han solicitado voluntariamente recibir el agua regenerada, se constituirán en un comunidad de regantes para gestionar el uso de la red de riego. Este proyecto ha recibido la declaración de interés general y se incluye en el Plan de Regadíos del Ministerio, en el que participa la Conselleria d'Agricultura del Govern, que ya ha presentado proyectos similares a este en municipios como Santa Maria del Camí.

El presupuesto de las obras es de 3.200.000 euros sin contar las expropiaciones, que irán a cargo de la Conselleria, con lo que el coste final puede alcanzar los 4 millones de euros. Esta actuación es la primera de un ambicioso plan hidrológico para el municipio redactado por el Ministerio de Medio Ambiente en el año 2000 con inversiones previstas que llegan a un total de 18 millones de euros.

Entre otras actuaciones también prevé la construcción de un anillo de colectores alrededor del casco urbano para aprovechar las aguas pluviales y minimizar al mismo tiempo el peligro de inundaciones.