El alcalde del Ajuntament de Alcúdia, Miquel Ferrer (UM), aseguró
ayer que «el Consistorio no consentirá que se urbanice la falda del
Puig de Sant Martí», a pesar de que el conseller de Territori del
Consell, Bartomeu Vicens, haya anunciado, a raíz de la polémica
sobre las diversas actuaciones urbanísticas previstas en es Secar
de la Real, que si esta zona se protege, tendrá consecuencias para
la falda del Puig de Sant Martí.
El Plan Territorial en un principio preveía proteger la falda
del Puig de Sant Martí, a costa de urbanizar 29 hectáreas de
terreno de es Secar de la Real en Palma, donde el Govern tiene
previsto construir el nuevo hospital de Son Dureta. En este mismo
enclave, el Plan Territorial contempla la creación de una
urbanización de 1.800 viviendas. Ferrer señaló ayer que estudiarán
«este tema en profundidad» y aseguró «que el Ajuntament no
consentirá que se urbanice la falda del Puig de Sant Martí».
El alcalde entiende que «legalmente no se puede urbanizar esta
zona». En este sentido, concretó que «en el planeamiento
urbanístico de Alcúdia esta zona está calificada como Àrea de
Protección (APR), lo que impedirá cualquier tipo de urbanización.
«La voluntad municipal es que no se urbanice, además tenemos el
planeamiento urbanístico que lo impide», añadió Ferrer.
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